Fiera de equis (bis)

Colores disonantes y remeras recortadas.
A veces pareces niña y a veces pareces vieja
aunque si entrecierro los ojos puedo ver la madera
de la que en verdad estas hecha.

Vapor de agua recalentada.
Hasta las piernas me arden al rodar tus instantáneas.
Aspirar y exhalar, inhalar y volar,
sin calzones te olfateo,
  sin razones,
    sin deseos.

Mientras tú me argumentas filtros
para no estar a la moda,
yo me escondo en tus archivos
y secuestro tus sentimientos.
Y aunque con tu permiso
me encuentre en este cuarto oscuro,
yo guardo todas las llaves
y tú todos los escudos.

Aparentas seguridad,
hueles a calor de una mañana devorada.
Dibujas con las uñas,
muerdes con todo el cuerpo. 

Y aún cuando sé
con suficiente certeza
que toda esta charada
solo existe en mi cabeza,
no puedo evitar preguntarme
si cuando al fin por tu piel pase mi lengua
será verdad o no
que lo único que sienta
no será más que electricidad
  desnuda,
    desierta.

3 comentarios:

Nataliepp dijo...

me gusto tu poema, que bueno que volviste a escribir :)

Unknown dijo...

Tuvo un efecto fenomenal, cuando leyendo tu poesía, escuché la melodía del soundtrack de la película -El laberinto del Fauno.

Fue exquisito.
Felicidades por tu trabajo